martes, 4 de diciembre de 2007

AGENCIA FUENTE NOTIMEX

Sicario ingresó a un hospital de Matamoros para rematar a Zayda Peña; la cantante era atendida por las heridas de bala que sufrió minutos antes en un motel

CIUDAD DE MÉXICO, México, dic. 2, 2007.- Con la muerte de la cantante mexicana Zayda Peña Arjona, continúa la ola de asesinatos a intérpretes o gente relacionada con la música grupera. La vocalista del grupo Zayda y Los Culpables falleció este sábado a los 28 años de edad tras ser atacada por un presunto sicario en un hospital de la ciudad de Matamoros, Tamaulipas, informaron medios locales. Se recuperaba de las heridas de un ataque a tiros que sufrió horas antes en un motel y en el que fallecieron Ana Bertha González, una amiga y Leonardo Sánchez, empleado del inmueble. Luego de ser herida con un arma de fuego, cuya bala le entró por a espalda y salió por la barbilla, la intérprete recibió en el quirófano disparos en el rostro en al menos dos ocasiones, según reportó la prensa del estado.

Artistas mexicanos de la llamada onda grupera han sido asesinados en los últimos años. Cabe recordar la muerte de Selena (31 de marzo de 1995) a manos de la presidenta de su club de admiradores. En noviembre de 2006 el cantante Valentín Elizalde, "El Gallo de Oro", fue ejecutado a tiros a la edad de 27 años, tras haberse presentado en un palenque de la ciudad de Reynosa, Tamaulipas. Tres meses antes también asesinaron a Trigo Figueroa, hijo del cantautor Joan Sebastian, con un disparo en la nuca cuando finalizaba un show de su padre en el condado de Hidalgo, al Sur de Texas. Adán Chalino Sánchez perdió la vida el 24 de marzo de 2004 en un accidente automovilístico en el que viajaba a lado de su representante Lorena Rodríguez y un chofer de la empresa que los contrató para dar un show en Tuxpan, Nayarit. Curiosamente en 1992, ahí también murió asesinado su padre Chalino Sánchez, el creador del narcocorrido. Aunque no fue asesinato, cabe recordar que Vicente Fernández Jr. fue secuestrado durante varios meses. La negociación para dejarlo en libertad tras haberle cortado un dedo sumó numerosos dólares. Con lo anterior, entre otros casos, se constata que el medio grupero ha vivido las peores tragedias en el mundo de la música latina en los últimos años.



EL LIBRO DE LAS PERCEPCIONES Se inicia el 4 de diciembre, a las 6:52, en Ciudad Victoria, Tamaulipas.

--crg

4 comentarios:

jorge dijo...

Ejercicio 1 JMA

Siento frescura, escucho carros, autobùses, la aceleraciòn de los mismos, la plàtica de dos señores, el deslizamiento del làpiz en mi papel, las llaves de una señoira al pasar frente a mì, ¿de qué color serán? Huelo a humo, siento la dureza del kiosco en mi espalda. Veo la luz ámbar de una lámpara de la plaza, el movimineto de la pierna izquierda de una muchacha de 20 años aproximadamente que viste de mezclilla. (Detenimiento) ¿Podré abarcar todo? Veo caer una hoja de árbol detrás de los ancianos que platican aún y al fondo un anuncio luminoso amarillo y una luz roja en lo alto. No calla el griterío de niños. Veo tres caminos para salir de la plaza, estoy en el de enmedio; el incesante tráfico de autos, el griterío, la plática, los pasos. Nunca acaba.

AKM dijo...

Ejercicio 1:

...escucho el rechinar de mis zapatos en este piso encerado;
siento las miradas de mis compañeros al pasar;
escucho el eco de mis pasos en las escaleras;
siento la prisa por hacer esto;
veo las cosas opacas, iluminadas por este foco en lo alto de las escaleras; escucho música melosa a lo lejos y una platica, con palabras que no entiendo...

AKM dijo...

Ejercicio 1:

...escucho el rechinar de mis zapatos en este piso encerado;
siento las miradas de mis compañeros al pasar;
escucho el eco de mis pasos en las escaleras;
siento la prisa por hacer esto;
veo las cosas opacas, iluminadas por este foco en lo alto de las escaleras; escucho música melosa a lo lejos y una platica, con palabras que no entiendo...

jorge dijo...

Ejercicio 2 JMA

Camino, mis brazos cruzados, viento fresco en mi rostro, luz verde, cruzo, ladrido lejano, mis pasos, el grafito deslizàndose en la hoja, smog, de nuevo mis pasos hacia la otra vereda, asfalto nocturno y oscuridad sospechosa, mi mano apoyada en el papel, camioneta pròxima, mis dos sombras